No pagan lo justo a fruticultores

Los árboles frutales este año no cargaron como se esperaba y por eso en la provincia hay poca fruta, sin embargo al ser comercializada, los productores son perjudicados por los intermediarios quienes no pagan el precio justo, sumándose además la falta de control en precios para de alguna manera normar esta actividad.

Humboldt Gamboa es fruticultor y se dedica a esta actividad en los cuatro mil metros de su propiedad ubicada en Pinllo. Dijo que posee cinco variedades de naranja, tres de limones, dos de lima, ocho variedades  de durazno con tres clases de abridores; sumándose los albaricoques, nectarines, ocho tipos de claudias, peras y más.

Comentó que los fruticultores no tienen control de precios para que les paguen lo justo el momento que se comercializa en el Mercado Mayorista de Ambato. Los días de feria para las frutas es lunes, miércoles y viernes e, pero los productores deben estar en la madrugada a merced de los intermediarios.

Una caja de Claudia está entre tres y cinco dólares que es bajo, ya que para  cosechar esta fruta hay que pagar a un peón el cual recoge cinco cajas al día y cobra por su mano de obra 17.50 dólares, y por eso algunos fruticultores prefieren no sacar el producto y dejar que se convierta en abono en los terrenos porque es difícil vender tan barato y no recuperar nada de la inversión.

Por eso, para mejorar esta situación es necesario el ‘control de precios’  tal como ocurre en otros países como Estados Unidos, donde don Humboldt laboró por varios años y comenta que en ese país el precio estaba establecido; es decir, en el costo está considerado la inversión del agricultor, la ganancia moderada de quien comercializa hasta que llega al consumidor final, pero son precios y ganancias razonables.

En Ecuador, en cambio, existen días en que los fruticultores deben retornar con las cajas de fruta a sus domicilios para ponerlos en el terreno en calidad de abono o como alimento para los cerdos, porque los intermediarios quieren el producto casi regalado, pero también están los fruticultores que no pueden regresar con sus productos, porque son perecibles y se ven obligados a venderlos en lo que pidan los intermediarios, acotó.

Ante esta situación, el proyecto a futuro en esta finca es que las familias lleguen y paguen una entrada simbólica para cosechen y coman en este mismo lugar, y sea todo una experiencia diaria. Por el momento, las familias pueden pedir la fruta y ese rato se le cosecha y se vende, o también pueden anticipar la llegada al llamar al 0984143153, agregó.

Inés Yolanda Ases Muzo, es la presidenta de la Asociación de los Huertos de los Agricultores de San Bartolomé de Pinllo, que es una organización joven de más de un año, y abarca 16 socios.

Esta organización se creó con el propósito de gestionar ante las instituciones que guardan relación con la actividad de la fruticultura para pedir apoyo.

En estos momentos uno de los inconvenientes que tiene este sector son las plagas ya que el exceso de calor hace que aparezca la mosca en forma preocupante, obligando a los productores a emplear algún insecticida o fungicida como última opción cuyos costos son elevados, ya que usualmente se tratan los inconvenientes en frutales con productos naturales como ‘macerados’, sumándose los abonos provenientes de estiércol de los cuyes, añadió.

Por el momento se ha recibido apoyo del GAD Parroquial de Pinllo y del Ministerio de Agricultura (MAG) en capacitación. Este año los árboles han dado poca fruta y pese a ello los intermediarios explotan a los productores, porque compran a precios bajos y revenden para obtener buenas ganancias, agregó la presidenta.

El presidente del GAD Parroquial de Pinllo, Ramiro Miniguano, dio a conocer que los fruticultores al momento de trasladarse al Mercado Mayorista de Ambato deben ubicarse en espacios específicos desde las 03:00 hasta las 07:00 horas, pero al llegar se topan con el intermediario que tiene comprado el puesto donde llegan los fruticultores  y es ahí donde aprovechan para negociar  precio que desean explotando al fruticultor y no pagando el precio real. Hace falta que las autoridades competentes fijen los precios para evitar que poco a poco se pierdan los huertos, añadió el funcionario.  (I)