¿¬¬¬Retirarse o no las mascarillas¬? / DR. Guillermo Bastidas Tello *Carolina Villacis Gallegos
En Ecuador se conoció, a finales de abril y principios de + mayo, la resolución del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional sobre el uso obligatorio de mascarillas en espacios públicos. Esto, tras un análisis del estado epidemiológico delpaís. En este contexto, es importante preguntarnos:¿Ecuador está listo para dejar de usar la mascarilla?
Realmente, la pregunta de cuándo dejar las mascarillas no se puede responder en forma general. Este cuestionamiento se debe analizar de forma regional o inclusive nacional.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) constató que Europa está en buena posición para controlar la enfermedad debido a la alta tasa de vacunación de su poblacióny al extendido nivel de contagios, sobre todo con la variante Ómicron.
Para Ecuador un escenario así no es alejado. En una entrevista, la ministra de Salud, dijo que el país podría ser el primero en Latinoamérica en retirar la obligatoriedad del uso de la mascarilla en espacios abiertos.
La medida surge en un momento en que la positividad de casos de COVID-19 está por debajo del 5 % en las últimas semanas, un escenario que el Gobierno esperaba para tomar la decisión de dejar la mascarilla en espacios abiertos.
El pasado miércoles, el viceministro de Salud Pública (MSP), dio a conocer que hay varias provincias de Ecuador donde “prácticamente se ha extinguido la pandemia”, al respecto debo manifestar los organismos científicos en el mundo aún no han declaro el paso de pantdemia a endemia, aunque no exista un control estadístico fiable no podemos irresponsablemente quitarnos los tapa bocas {mascarillas).
Solamente deberíamos retirarnos las mascarillas cuando la morbimortalidad haya disminuido ostensiblemente, cuando el 70 % de la población haya recibido la cuarta dosis, caso contrario deberemos seguir las normas de bioprotección, bioseguridad, distanciamiento, lavado de manos y utilización de gel y alcohol.
La pandemia no ha terminado siguen apareciendo nuevas variantes del COVID – 19 y este organismo salvaje se encuentra agazapado esperando el descuido de los ciudadanos y la irresponsabilidad social.