No mentir, no robar, no ser ocioso

Por: John Tello Jara

Partamos de estos tres principios fundamentales que deberíamos promulgar todos los días; “no mentir”, ¡deberíamos decir siempre la verdad! pero porque mentimos? Inicialmente puede ser para evitar una sanción o para disculparnos de alguna falta, pero a medida que pasa el tiempo, lo convertimos en hábito y forma parte de nuestra vida.

Consultaba la edad a una amiga, en su cumpleaños y me decía que no sabía, ya que, a cada persona, le decía años diferentes, pero porque lo haces le increpé, no sé por qué, pero siempre lo realizo y a veces yo misma me confundo.

En actividad empresarial, el gerente valora mucho que el trabajador diga la verdad, aun cuando esa verdad sea dura; lo que no quiero es que falle en la práctica de valores, ya que, aún el más rudo aprende a manejar una máquina o herramienta, pero formar a los trabajadores con responsabilidad, respeto, disciplina, aseo, puntualidad, liderazgo, eso sí es tarea difícil.

El robo tiene que ver con la sustracción de dinero, tal vez de un repuesto, de un pedazo de tela, pero también puede estar relacionado con el “robo del tiempo” y, eso es muy valioso e irrecuperable, ya que las cosas materiales se las puede resarcir, no así los valores (la pérdida de la confianza y la credibilidad es un fenómeno que impide el desarrollo del ser humano como tal. El tiempo “robado” se lo pudo haber destinado al conocimiento, al entrenamiento empresarial, a la tecnología u otros; es increíble ver como las personas nos consumimos diariamente atrás de un “teléfono inteligente” visualizando el whatsapp para leer los últimos comentarios de los grupos que nos han añadido o en el Facebook que “nos permite estar al día en los paseos y actividades de personas que a veces ni conocemos, pero que es una linda manera de robar el tiempo.

Levantémonos, dejemos de ser ociosos, ¡a un lado la pereza! ¡arriba el ánimo, que, si esperamos que se acabe la crisis para emprender, primero se terminarán nuestros días; a poner en práctica estos tres principios queridos lectores. (O)

 

Consultor empresarial

Ama quilla, ama shua, ama llulla,