La época del recogimiento espiritual empezó
sedLa Cuaresma inició y significa que cada persona se adentra en su interior para tener en cuenta las falencias y pedir perdón a Dios. Es el tiempo de penitencia, porque se recuerda que son los pecados los que llevaron a Cristo a la cruz.
El colocarse la ceniza en la frente es el símbolo de recordar que “del polvo somos y al polvo volveremos; es decir, sin Dios nada somos y por Dios todo somos. Nuestro accionar debe estar orientado a vivir en comunión con el Todopoderoso”, explicó Juan Carlos Acosta, ecónomo de la Diócesis de Ambato.
En este tiempo se espera la conversión; es decir, mejorar como personas. No se puede mantener al margen la espiritualidad en la familia, el trabajo, en el barrio y la cotidianidad, agregó el ecónomo.
“En la Cuaresma debemos tener mucha fe, asistir a misa y aplicar los mandamientos de Dios. Todos debemos mantener la fe para sentirnos vivos”, indicó la feligrés Catherine Lasluiza al tiempo de recibir la santa ceniza en la frente. (I)