Venezuela en Ruinas / Gabriel Morales Villagómez
Venezuela, la Patria Grande, la tierra del Libertador Simón Bolívar está siendo destrozada por una pandilla de trúhanes de la peor calaña, quienes han llevado a su pueblo a la miseria y a una dolorosa crisis humanitaria.
Venezuela siempre fue un país respetable y próspero en la comunidad internacional, un referente en el manejo de los recursos hidrocarburíferos a nivel mundial, hasta la llegada al poder del “socialismo del siglo 21”, encarnado en el militarismo chavista.
Antes de la llegada del “Chavismo” Venezuela mantenía una situación relevante y de respeto en el mundo, sus industrias prosperas, su economía boyante. Como productor y exportador de petróleo llegó a producir, en promedio 3,3 millones de barriles diarios de petróleo y por increíble que parezca, todavía es considerado como uno de los países con las mayores reservas probadas de petróleo en el mundo.
Con el acceso al poder del Coronel Hugo Chávez en 1999, empezó el descalabro del país, llegó la corrupción y el despilfarro. El Chavismo hizo de los hidrocarburos un instrumento de enriquecimiento ilícito de unos pocos y de control político interno clientelar para mantenerse en el poder, subsidios y dadivas a cambio de votos.
En el manejo de la política exterior, apareció la “diplomacia del petróleo” que consistía en regalar los recursos petroleros a países regentados por dictadores, en una burda lucha ideológica-política, aupando a otros gobernantes corruptos e incapaces a alinearse en contra de lo que llamaron el “imperialismo Americano”.
La mala administración del Estado Venezolano ha llevado a destruir la producción petrolera por falta de inversión, y ya sin recursos por los bajos precios del petróleo, al igual que sucedió en el Ecuador con la “revolución ciudadana”, empezó el endeudamiento exterior y la ruina, sometiendo a sus ciudadanos a la pobreza, la carestía de alimentos, a la falta de productos de primera necesidad y a la migración de sus ciudadanos.
El Chavismo, ahora regentado por Nicolás Maduro ha llevado a Venezuela al fracaso; la corrupción sínica y rampante en todos los estratos del gobierno. La gente padece hambre y muere por falta de medicinas y atención médica. La inseguridad y la muerte rondan por las calles de las principales ciudades del país.
Hugo Chávez y Nicolás Maduro han convertido a Venezuela en un Estado paria, aislado de la comunidad internacional.
Ahora mismo, miles de venezolanos, familias enteras, mujeres y niños, sufren de hambre, están enfermos, tratan de cruzar las fronteras de Colombia y Ecuador, en la búsqueda de mejores días. Estos ciudadanos son nuestros hermanos, miembros de la Patria Grande, no merecen ser discriminados ni maltratados por su condición migratoria, requieren de nuestra solidaridad.
Los ecuatorianos somos gente buena, ayudemos a que ellos tengan una nueva oportunidad de vida, aliviemos su dolor, no seamos insensibles e indiferentes ante su tragedia. Venezuela en su momento recibió a muchos emigrantes ecuatorianos. (O)