Iglesia de Santo Domingo, ícono histórico del Ecuador
En el Centro Histórico de Quito está uno de los sitios más antiguos de la nación. Se encuentran valiosas estructuras. Entre las joyas barrocas que se cuidan celosamente está la Capilla del Rosario que constituye una obra significativa de la arquitectura.
Aprovechando la llegada a Quito del arquitecto Francisco Becerra en 1.581, los religiosos recurrieron a sus servicios para que diseñara el conjunto conventual y su iglesia; sin embargo, la partida de Becerra en 1.583 dejó la obra solo en cimientos.
Su construcción es de estilo ‘plateresco’ y ‘mudéjar’ que data del siglo XVI.
Desde 1586 trabajó en Santo Domingo el fray Pedro Bedón, a quien se le atribuye como fundador de la Escuela Quiteña de Pintura.
Para la iglesia y convento el virtuoso fraile talló y pintó obras que aún pueden admirarse.
En la construcción de la Iglesia se utilizó en los muros de calicanto, ladrillo y cal, piedra en la cimentación y madera en los pisos, artesonados y cubiertas.
El estilo del entorno es una mezcla neoclásica y manierista expresada en las edificaciones aledañas que se constituyen en un elemento urbano que permite visualizar y resaltar al templo.
Entre los atractivos de la iglesia están: Virgen de la Escalera, Virgen del Rosario, Altar Mayor, Techo, Cubierta y capilla del Rosario. (I)