Shuyurco y los Finados / Editorial
Una importante concurrencia de público hubo en la Feria de Finados realizada en la explanada de Shuyurco, en la zona de Picaihua.
Entre los vendedores y comerciantes figuraron algunos de Tungurahua que tuvieron la oportunidad de exhibir sus productos, desde pailas fundidas hasta flores de plantas secas y máscaras pasando por calzado y textiles de calidad.
Los vendedores y comerciantes de otras ciudades también exhibieron productos nacionales interesantes.
Las artesanías de barro tuvieron su espacio, aunque reducido, debido al poco interés en exhibir productos artesanales de este origen, lo cual es lamentable, en consideración a que las artesanías de barro fueron las que marcaron inicialmente la ruta de la Feria de Finados.
La explanada fue suficiente para albergar a los comerciantes y al público, además de los juegos mecánicos. Lo que llama la atención es que no se le de un uso más intenso en otras actividades y exposiciones.
Allí estaba programada la venta de vehículos usados, que, hasta ahora, no ha sido trasladada desde las principales arterias viales de Picaihua. (O)