Bares escolares / Editorial
En buena hora, para precautelar la salud de los estudiantes, la Agencia Nacional de Regulación y Vigilancia Sanitaria (Arcsa), ha venido supervisando y controlando las condiciones higiénico – sanitarias de los bares escolares, algo que, sin duda, resalta una acción positiva, en torno al ámbito de la salud estudiantil.
Es de suma importancia que las respectivas autoridades de control estén al tanto de las condiciones de higiene que un bar debe presentar, sean en instituciones públicas y privadas, ya que el servicio de alimentación hacia niños y jóvenes debe ser saludable, como la inclusión de frutas, evitando la denominada ‘comida chatarra’.
En Tungurahua son alrededor de 117 bares escolares. Incluir un plan nutricional para los estudiantes es positivo, ya que, además del estudio, una nutrición saludable, ayuda al organismo para tener un desarrollo físico y mental.
Años atrás, por así decirlo, las condiciones de salubridad en varios bares escolares, eran terribles y no había el aseo correspondiente, algo que con el tiempo ha venido cambiando y generando conciencia incluso desde los organismos de control.
Por ende, dichas visitas hacia los bares escolares, por parte del Arcsa, debe ser constante, ya que los beneficiados al final serán los padres de familia que confían en que sus hijos están recibiendo una alimentación acorde a su necesidad física. (O)