Salud de la propuesta a la Demagogia / Dr. Guillermo Bastidas Tello
Maravillosos proyectos, fenomenales propuestas, sorprendentes reformas, extraordinarios planes y coloridos ensueños sobre la Salud se fraguan y son los anzuelos lanzados en cada período de elecciones.
Cada candidato presenta Planes Nacionales y locales de Salud dignos de un futuro premio nobel de medicina, pero a la final resultan dichas propuestas sobre la Salud de Todos, pura demagogia, falacia y mentira politiquera para ganar adeptos y votos.
La salud, considerada como un bien social garantizado por la Constitución para 300 años, aún está lejos de ser una realidad tangible en nuestro país.
En Ecuador la situación Sanitaria en el año 2019 es cada vez peor, puesto que forma parte de un precario sistema social pletórico de corrupción que va fortalecido por una pésima administración Pública del Estado; lo cual ha llevado a nuestro país a altos índices de pobreza (54%), de desnutrición infantil (21%) y de morbi-mortalidad, en la mayoría de los casos causada por eventos prevenibles con la ciencia y tecnología siglo XXI.
La mayoría de la población no tiene posibilidades de acceso a los servicios sociales que necesita y la oferta institucional sanitaria, aparte de ser demagógica y desarticulada, adolece de graves deficiencias de cobertura y calidad.
Hay una gran demanda de especialistas en Salud, sin embargo, los organismos burocráticos ortodoxos que lideran ineficientemente la Salud y la Educación Superior, han creado más barreras que oportunidades a los jóvenes profesionales que ven más fáciles los requisitos para ser Canonizado que homologado o reconocido sus títulos de especialidad tipo presencial, semi presencial u On Line o TÍTULOS de HECHO.
Piden títulos con grado PHD hasta para podar los predios de un jardín; sin embargo, a los suyos o cognados se los gradúa y sus títulos se los sube a las plataformas sacro santas de la Educación Superior sin haber realizado ni asistido al curso de inauguración de la Maestría.
No hay plazas suficientes para los estudiantes que se forman en las Universidades ecuatorianas, pero si hay para los titulados en el extranjero, lo equitativo sería que primero se preocupen de dar trabajo a los formados con presupuesto ecuatoriano y luego a los extranjeros que se lo merecen.
No hay becas suficientes para realizar un post-grado en el Ecuador y si logras ganarte una, luego te dicen que no hay presupuesto o te consideran mano profesional barata.
Los sabios quitaron la posibilidad de que en la Federación médica ecuatoriana y sus Colegios de Médicos, luego de un riguroso sistema de calificación se generen especialistas de HECHO.
Finalmente, el mismo cuento, no hay presupuesto suficiente para la salud, no hay plazas suficientes para los Internos Rotativos, no hay suficientes medicamentos en las farmacias públicas, no hay suficientes medicamentos para las enfermedades catastróficas, sacar un turno para Neuropediatría es más difícil que sacarse la lotería. Entonces Salud o Demagogia. (O)