Apoyo social y restitución de derechos a víctimas de violencia
Proteger, atender y restituir es la responsabilidad que tiene la Secretaría Nacional de los Derechos Humanos dentro de la Ruta de Atención a víctimas de violencia.
Tungurahua es un referente nacional en la aplicación de rutas de atención a víctimas evitando la revictimización.
“La revictimización se ha reducido evidentemente y está en aplicación hace más de un año. La ruta es unificada ya que acoge a organismos públicos que son de atención prioritaria. Tenemos una relación estrecha con el Ministerio de Educación, porque en ocasiones es la fuente que detecta las agresiones de violencia de manera inmediata y luego de un proceso la Secretaría Nacional de Derechos pasa a monitorear los casos a través del seguimiento. Ingresamos con atención, seguimiento y restitución de derechos”, dijo.
La ruta de atención trata casos en violencia física, psicológica, abusos sexuales o vulneración de derechos.
Aclaró que una persona no puede exigir un derecho si no sabe como empoderarse de los mismos.
La ruta inicia con la denuncia en el ECU 911, Policía Nacional o Red de Salud Pública, en donde las personas violentadas deben solicitar el certificado médico.
El otro paso es solicitar justicia para que el daño sea reparado a través de terapias psicológicas, atención médica o social.
Para el psicólogo, Diego Echeverría, la atención primaria debe ser fundamentada en su totalidad al inicio de la denuncia, ya que así la revictimización no continúa un largo camino que en ocasiones causa malestar y ansiedad en la persona violentada.
Juan N. (nombre protegido) de 14 años de edad, fue víctima de violencia sexual por su padre. Fueron ocho meses que tuvo que contar la misma historia una y otra vez, hace cinco años. Ahora vive con su madre, quien cree necesario evitar el sufrimiento psicológico de recrear y repetir la versión de la historia en víctimas de violencia sexual. (I)