Cierre de vías dominical / Editorial

El pasado domingo se cerraron algunas vías del centro de Ambato para la promoción de actividades culturales y deportivas.

Está bien que se promocionen esas actividades. Es importante el fomento del deporte y la cultura. 

El problema es que el cierre de las calles dificulta el acceso y la salida de quienes quieren, el domingo por la mañana, ingresar o salir de sus hogares y espacios de actividad productiva. Por los obstáculos, resultan discriminados con relación a otros ciudadanos, de otros sectores, que no soportan semejante carga sobre el derecho a la movilidad y libre tránsito.

El problema se agrava cuando al cierre de las calles se suma el ensordecedor ruido de parlantes y bandas de los protagonistas de las actividades culturales y deportivas, que quiebra el silencio matinal del domingo, día de descanso. 

El centro de la ciudad no es, el domingo por la mañana, un desierto de edificaciones vacías. Dentro de ellas viven y trabajan personas con derechos, entre ellos, al descanso, a la tranquilidad y al libre tránsito.

El Municipio debe tomar medidas para proteger esos derechos y los derechos a la ciudad de quienes viven y trabajan en el centro. (O)