ONG preocupada por violencia en frontera
Quito, (EFE).- La Fundación de derechos humanos Inredh de Ecuador expresó ayer su preocupación por eventuales actos violentos y el despliegue de militares y policías en la provincia de Carchi, fronteriza con Colombia, para tratar de controlar las protestas sociales que se han producido esta semana.
El Inredh, en un comunicado difundido en redes sociales, recordó a las instituciones estatales que «las personas manifestantes tienen derecho a expresarse libremente, lo que implica emitir sus opiniones de crítica frente a las políticas y autoridades».
Asimismo, añadió que los grupos sociales que protestan contra el Gobierno gozan del «derecho a reunirse pacíficamente con la finalidad de hacer oír sus demandas y malestares en el uso legítimo de su derecho constitucional a la resistencia».
La fundación recordó que la normativa interna precisa que, «en el caso de producirse enfrentamientos, es deber de las autoridades policiales que consideren siempre los estándares del uso progresivo de la fuerza, con la finalidad de evitar lesiones a la integridad y vida de las y los manifestantes». (I)