13 de abril Día del Maestro / Edison Buenaño Benalcázar

El 13 de abril de cada año celebramos el día del Maestro Ecuatoriano, que tiene la gran responsabilidad de formar a los niños, niñas y jóvenes, para que sean un aporte significativo para las necesidades de nuestra sociedad, aportando la sabiduría, inteligencia, capacidad y experiencia, en esta época actual de constantes cambios.

El buen maestro no es que sabe mucho, sino el que transmite lo que sabe y aprende enseñando, el maestro de esta época  cada vez que se pone en contacto con los niños y jóvenes tiene que enseñar y dirigir el proceso de enseñanza – aprendizaje , procurando que del estudiante salga el conocimiento , el maestro tiene que ser profesional puro en el sentido psicopedagógico , debemos olvidarnos del dictador de clases porque es lo que menos necesitamos en los actuales momentos, ya que informamos una cantidad de cocimientos pero no formamos en muchos casos, lo que se pretende es la formación de estudiantes críticos, creativos, reflexivos, con un conocimiento real de su libertad, para la construcción de nuevos modelos sociales, para lo cual el maestro tiene que ser más humano, dé mente positiva, de buen corazón ,justo, digno, libre ,tolerante, un orientador un guía, gran estimulador, que se pone al servicio de los demás , en definitiva una buena persona.

Como dijo Alejandro Gasona: “Un maestro no es un simple enseñador de letras o números, es necesariamente un artista en su dimensión social más jerárquica, es un artista moral que es ejemplo para todas las personas, utilizando inteligentemente los recursos psicológicos y sociales indispensables”.

La mejor cosecha que tienen los maestros es cuando han sembrado en los estudiantes las mejores semillas del amor, responsabilidad, honestidad y respeto, solo así se sentirá la satisfacción de saber que sus estudiantes ocupan puestos importantes en las diferentes instituciones públicas y privadas.

Los maestros tenemos que pensar que es una obligación la de ayudar a triunfar a sus estudiantes, esto no significa regalar notas, sino sencillamente a darles oportunidades, estímulos, que sepan ganarse las calificaciones con un trabajo sistemático y organizado, no tenemos que limitarnos solamente a impartir conocimientos sino básicamente formarles integralmente para que puedan enfrentarse inteligentemente los constantes cambios.

El maestro es un ser humano, que debe tener espíritu vocacional, con gran sentido de responsabilidad, con una entrega total sin condiciones hacia la difícil pero hermosa tarea de formar personas para que aprendan a comportarse responsablemente consigo mismo y con los demás, con el propósito de ayudar a solucionar los problemas de nuestra sociedad.

Cuando el maestro es feliz en su profesión, siente el afecto hacia los demás, está encaminado a buscar el bienestar y satisfacción de todos los que están en su entorno en el diario convivir, ya que desear el bien de los demás es amor.

Siendo los maestros la fuerza que impulsa el progreso y desarrollo de nuestro país, las personas rinden homenaje de admiración y respeto, por que conocen de sus sacrificios, por la función y responsabilidad de formar a muchas generaciones ya que en sus manos está el porvenir y el futuro de los niños y jóvenes de nuestra patria.

 Desde el hogar a fortalecer a la familia a tener fe y esperanza para que esta pandemia pase pronto, así como han pasado un sinnúmero de fenómenos naturales. Dios sabe dónde nos lleva, por lo tanto, la mejor vacuna es quedarse en casa, cuida tu vida y de las demás personas, cuando la tragedia nos golpea debemos luchar contra los temores, jamás perder la esperanza, la solidaridad es responsabilidad de todos, estos momentos tremendamente difíciles a todos nos afecta. (O)