El sistema sanitario de Quito trabaja a «máxima potencia»
Quito, (EFE).- El sistema sanitario de la capital ecuatoriana trabaja a «máxima potencia», aseguró ayer lunes el alcalde de la ciudad, Jorge Yunda, quien se mostró «muy preocupado» por el crecimiento de contagios en algunos barrios de la urbe.
En una rueda de prensa con la ministra de Gobierno y presidenta del Comité nacional de Operaciones de Emergencia (COE), María Paula Romo, y el titular de Salud, Juan Carlos Zevallos, el burgomaestre apuntó que el aumento de contagios podría llevar, en algún momento, a adoptar algún tipo de restricciones en el centro histórico o ciertas zonas del sur de la ciudad.
Y sin entrar en detalles, indicó que las medidas irían «en función de evitar aglomeraciones» en la que es capital del país y de la provincia de Pichincha, donde se han confirmado hasta este lunes 7.081 casos (12,7% de los casos nacionales) y 497 (11%) fallecidos por coronavirus.
Quito, donde el impacto de la enfermedad ha sido mucho más progresivo que en la costera Guayaquil, no consigue frenar el contagio pese a las estrictas medidas adoptadas desde el 16 de marzo.
Sobre todo desde que el pasado 3 de junio pasó de rojo a amarillo en el semáforo epidemiólogico nacional, una desescalada que parece haber producido algunos fenómenos de aglomeraciones al margen de las prohibiciones vigentes.
Yunda, médico de profesión, pidió en ese sentido la corresponsabilidad de la ciudadanía para evitar el avance de la COVID-19 porque «todos los días» deben afrontar fiestas clandestinas y otros tipos de aglomeraciones.
Pero lo preocupante es el promedio de contagios entre los dos períodos, que se ha duplicado en el mes de junio a un centenar diarios, lo que hace que el sistema de salud se vea más saturado. (I)