El espectacular mirador de Putzalagua/ Luis Silva
El Ecuador que debemos conocer
El Putzalagua, esuna montaña que se encuentra en la provincia de Cotopaxi. Por su figura, ubicación aislada, dentro del callejón interandino, y por su cumbre que llega a los 3.450 metros de altitud; es fácilmente observable, desde La Carretera Panamericana, entre las poblaciones de Salcedo y Latacunga.
Para subir a la cumbre, hay que hacer un acercamiento, hasta la plaza de la parroquia Belizario Quevedo, donde comienza el ascenso. Se pasa por el cementerio y se llega a La Hacienda El Tablen. Un sendero que va en zigzag por la parte sur de la montaña, conduce a la cima llena de pajonales y de la hermosa flor del andinista, La Chuquirahua.
La cúspide, ofrece un espectacular mirador de La Subregion lnterandina, desde El Nudo de lgualata, al sur, hasta el de Tiopullo, al norte. Se admira, en el dilatado altiplano, varias poblaciones que interrumpen el maravilloso paisaje del entorno. En algunas ocasiones, las condiciones de la atmosfera, permite contemplar, ese fantástico paraje, cubierto de transparentes y deslumbrantes rayos solares que caen asombrosamente desde el cielo, dando un espectáculo natural, inolvidable y precioso.
En La Cordillera Occidental de los Andes, se miran impresionantes montañas, que forman un hermoso horizonte. El Chimborazo, con sus enormes glaciares, que cubren «El Coloso de los Andes»; El Carihuairazo, con sus negras rocas, apenas cubiertas de nieve; El Sagatoa o Pilushurco, con sus diez picos, llenos de antenas; Los picachos del fantástico volean Quilotoa, y las agudas cumbres, norte y sur, de los lllinizas.
Caminando, por la alargada cima del Putzalagua, hasta el punto culminante, se aprecia el volcán Cotopaxi, cubierto de gigantescos glaciares que bajan por las laderas, formando impresionantes lenguas de nieve y hielo, en La Cordillera Oriental de los Andes. Mas al norte, aparece la sobresaliente cima del cerro Sincholagua. A parte’ de La Cordilla Oriental de los Andes, en el altiplano interandino, asoman las montañas; Rumiñahui, llena de negras rocas y El Pasochoa, con una inmensa caldera, cubierta de gran cantidad de plantas silvestres, al igual que la cumbre.
El descenso, se hace por la parte norte del Putzalagua, por una abrupta ladera, hasta encontrar un bosque de eucaliptos, se sigue y se baja al valle del ria llluchi, atraviesa por algunas casitas de campo y se arriba a la ciudad de Latacunga; donde termina, esa agradable y encantadora excursión. (O)