Dentro de la frutería libaban
La venta de frutas era una de las actividades, pero dentro del local también acogían a personas que iban a ingerir bebidas alcohólicas.
Los policías descubrieron este local clandestino donde vendían licor sin los debidos permisos. La alerta se pasó a la comisaria Lizbeth Torres, quien llegó hasta el local y al pedir los documentos no los obtuvo.
El operativo se lo realizó por la Plaza Urbina, donde los policías retiraron a diez personas que estaban en el sitio ingiriendo bebidas alcohólicas.
De igual manera incautaron nueve botellas de licor de caña sin el debido registro sanitario. El local fue clausurado. (I)