La belleza de una ruta / Luis Alfredo Silva Zambrano
Hace algún tiempo, en La Ruta Spóndylus, admire un sector de incomparable belleza, comprendido entre las ciudades de Pedernales y Jama, en La Subregión Costera, del norte de La Provincia de Manabí.
Pedernales, es una ciudad de gran desarrollo turístico; tiene un clima agradablemente tropical, atenuado por la brisa marina, que sopla del mar hacia la costa, del apacible océano, conocido como Pacífico.
La Ciudad de Pedernales, se caracteriza por su activo comercio, sabrosa comida y por la hospitalidad de su gente. Desde esa urbe, se toma la carretera que conduce a La Ciudad de Jama, al comienzo aparece, una asombrosa sabana, de diferentes matices verdes, que presentan las abundantes plantas herbáceas, y los esporádicos árboles de copioso follaje.
Luego de un breve recorrido, la vía va paralela al mar, lo que permite observar, la hermosa playa y su amplio horizonte. Al alejarse del mar, la carretera entra en una zona de gran vegetación silvestre. Un aviso, le indica que está en Palmar; lugar donde, La Misión Geodésica Francesa, en 1.736, señalo el cruce de la línea ecuatorial, por donde también, pasa por los hemisferios norte y sur.
Cuando se atraviesa, el recinto Tabuga, se ingresa en El Cantón Jama, conocido como «El Edén Manabita». Un denso bosque, de atractivo verdor, engalanado con flores amarillas y algunos hermosos arbustos; dan la bienvenida, a la hermosa tierra, de inconfundible belleza. De la ruta, parten varios desvíos, que van a las pintoresca y mágicas playas, como el que conduce a las caprichosas formaciones rocosas, denominadas «El Arco del Amor, en la playa de Tasaste; a un hotel con bella vista, en La Punta Blanca; a un playa de fascinantes paisajes, en el balneario de Don Juan; a la placidez de la playa La División; a La Punta Ballena, para disfrutar de la naturaleza; a las tranquilas y cristalinas aguas, que bañan la playa de El Matal.
Luego, de unos minutos, se llega a La Ciudad de Jama, identificada por una singular arquitectura, muestra las centenarias casas de madera. Se encuentra rodeada, de exuberantes bosques y cerca de playas de asombrosos encantos. Sus habitantes, son muy amables y hospitalarios. (O)