Picaihua siente efectos de la ola migratoria
Ingresando a Picaihua, por la avenida Galo Vela, se aprecia casas en mal estado por la falta de mantenimiento. (Foto El Heraldo)
Familias incompletas, niños huérfanos y animales abandonados, son los principales problemas sociales que se siente en Picaihua, una de las parroquias rurales de Ambato, donde se concibe los efectos de la nueva ola migratoria hacia Estados Unidos, que según datos del año pasado rondó los 100.000 inmigrantes irregulares.
A la par de la pandemia, varias familias comenzaron a desintegrarse. Según conocimiento de la teniente Política de Picaihua, Verónica Lozada, cerca de 50 habitantes de esta parroquia, han salido en busca de oportunidades, la mayoría rumbo a intentar ilegalmente ingresar a Estados Unidos y otros a España.
“Conocemos muchos casos de migración. En la pandemia salieron y llegaron a repatriar a los cadáveres, que estaban en la frontera, vinieron niños solos, tuvimos que ver con las instituciones para traer a los niños, que quedaron huérfanos”, explica Verónica Lozada.
Pero estos cuadros no han impedido que entre el 2021 y 2022 aumente la ola migratoria en esta parroquia. “Se incrementó con la economía que estábamos sufriendo. En el 2021 empezaron a salir y en el 2022 se sintió más, porque la gente no tiene los recursos, ellos fueron a probar suerte, ‘El sueño Americano’”, relata Lozada.
Incluso en los equipos barriales de fútbol se siente la migración. Igor Guzmán, periodista deportivo que vive en Picaihua y es directivo del ZB, señala, “tenemos 8 equipos, varios de los jugadores nuestros se han ido, incluso el secretario del directorio. Se fue a Estados Unidos, está como 8 meses allá. Entonces es una muestra que mucha gente ha salido de Picaihua”.
Picaihua está compuesta por 11 caseríos. La mayoría de migrantes, según la Teniente Política, son de Tangaiche y La Atarazana, por el tema poblacional; sin embargo, de todos los lugares de la parroquia han salido con rumbo a Estados Unidos en su mayoría y en menor número a España. (I)
