Y LA AUDITORÍA DE NUESTROS COLABORADORES? / John Tello Jara

Columnistas, Opinión

con frecuencia pedimos reportes a nuestros contadores sobre los indicadores de la empresa para ver el cumplimiento de metas, la rentabilidad sobre la inversión, los activos acumulados, las deudas del período y demás.

Está bien analizar los bienes y servicios  institucionales, pero me pregunto, nos hemos detenido alguna vez a analizar qué pasa con nuestra salud y la de nuestros colaboradores, cómo afecta a su  visión, a su garganta, a su espalda, la posición que adopta en su puesto de trabajo y los dispositivos que utilizamos el instante que nos encontramos con elementos químicos de alto riesgo?

Pero no solo es la salud del trabajador, conocemos acaso que es lo que sucede con su familia, si se encuentran endeudados, viven en un sitio apropiado, si están con problemas de divorcio o consolidados en su hogar? Aparte de esto, debemos motivar al deporte,  es esencial en los seres humanos y nosotros en calidad de pequeños, medianos o grandes empresarios debemos dar el ejemplo para llevar una vida socialmente activa y llevar a cabo de partidos de futbol, basquetbol, ir a la piscina, realizar atletismo e incluir a la familia periódicamente.

Salud, deporte, alimentación, fe en el ser supremo, responsabilidad con la sociedad, formación profesional, son temas relevantes que a más de los productivos deberíamos tratar en todas las entidades públicas o privadas.

Veremos que el ser humano cuando es considerado como tal, tiene un rendimiento óptimo en el trabajo, mejora su predisposición de ayuda y se encuentra presto a cumplir nuevos retos.

Si estas actividades son tan elementales, me pregunto, por qué no las cumplimos? que nos impide considerarlas? contrariamente a lo que pensaríamos, no es el aspecto económico lo que reprime llevar a cabo estas tareas, si no la falta de  visión y planificación del área de talento humano.

Los libros nos dicen que debemos “vender más, tener mayores utilidades, hacerle exitosa a la empresa”, pero la práctica nos evidencia que al ubicar al ser humano  en el sitio adecuado, podemos cumplir el objetivo de contar con un personal feliz, que tendrán familia  contenta, los cuales podrán ser buenos seres humanos para el país.

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