Modernización de la justicia ecuatoriana

Columnistas, Opinión

Ecuador, tradicionalmente, ha sido un país al que los avances jurídicos y la modernización, tanto en criterios como en tecnología, han llegado con años e incluso décadas de retraso. Esto nos ha condenado a lidiar con un arcaico sistema judicial en el que incluso algo tan básico como las citaciones sigue siendo un problema.

Hace unas semanas, el Consejo de la Judicatura emitió un reglamento que prohibía compartir los enlaces de Zoom de las audiencias virtuales, permitiendo únicamente su transmisión en YouTube. Esto ocurrió en el contexto de que varios jueces, comprometidos con la transparencia y modernización, compartían los enlaces de Zoom de sus audiencias para que la gente pudiera ingresar, escuchar, aprender y opinar. Aunque no es un problema grande, este tipo de situaciones demuestran lo poco que le interesa a Ecuador estar a la vanguardia en la aplicación de tecnología en el ámbito judicial.

Otro gran ejemplo es la utopía del expediente electrónico. Se ha hablado y prometido mucho al respecto, pero aún no se ha cumplido. La transición hacia un expediente electrónico no es fácil, ya que conlleva desafíos financieros (para un Consejo de la Judicatura que ni siquiera proporciona papel a los Juzgados) y desafíos tecnológicos. Sin embargo, tampoco se ha visto voluntad por parte de las instituciones para avanzar en este sentido.

Lógicamente, todo esto está relacionado con la lucha contra la corrupción judicial, que de alguna manera ha minado la confianza en el sistema. De nada servirá tener tecnología de vanguardia, expedientes electrónicos y audiencias virtuales públicas si los jueces siguen resolviendo «bajo la mesa».

En cualquier caso, a pesar de lo lejos que estamos en términos de avance judicial, estas innovaciones llegarán en algún momento. El progreso tecnológico es irresistible y, al igual que en su momento se implementó el sistema de revisión de casos judiciales en Internet (antes SATJE, ahora EXPEL), en un futuro distante podremos contar con expedientes electrónicos, un eficiente sistema de citaciones y audiencias virtuales completamente públicas. (O)

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