Manejo presupuestario familiar requiere atención
La ausencia de criterio sobre el correcto uso del dinero y educación que fomente el ahorro podría ser la causa para que las familias derrochen el poco dinero, el mismos que podría ser utilizado de manera adecuada e incluso crear fondos y reservas que les permita alcanzar metas y objetivos en el mediano plazo, señala Marcelo Mejía, analista económico.
Y añade, los objetivos a mediano plazo pueden ser adquirir bien, crear el fondo de estudios o simplemente planificar vacaciones, no sin antes mantener la previsión de posibles problemas que se puedan presentar en la familia como pérdida de empleo o emergencia de salud.
Esta realidad económica y los cambios sociales se han conjugado para incorporar conceptos como la educación financiera. Se dice que tuvo sus orígenes en el siglo XVIII cuando diferentes corrientes de especialistas abordaron la temática al analizar el modo de vida de las familias mediante la observación de sus presupuestos.
La Asociación de Bancos Privados (Asobanca) cuenta con plataformas que orientan a la colectividad sobre educación financiera y señala que es el proceso a través del cual las personas adquieren y mejoran su comprensión sobre conceptos financieros, lo que impulsa el desarrollo de sus capacidades financieras, el correcto manejo de las finanzas personales y la toma de decisiones económicas informadas y acertadas.
La observación del presupuesto de las familias direcciona a emitir sugerencias sobre el uso de los sobresueldos; entonces, la educación financiera en el hogar debe estar basada en reglas que deben conocer los miembros de la familia, señala Marcelo Mejía.
A decir del analista económico, es importante llevar las cuentas (ingresos y gastos mensuales); equilibrar el estilo de vida (generar hábitos productos y no de consumo desmedido-ejemplo ahorro de energía); diferenciar entre lo que se necesita y lo que se desea (priorizar necesidades); crear el fondo de emergencia (atención de enfermedades, pérdida de empleo u otras contingencias).
También se habla que los recursos económicos extras en el hogar podrían ser orientados a emprendimientos. Según el catedrático y presidente del Colegio de Economistas de Pichincha, Santiago García Álvarez, en entrevista concedida a Radio Quito, “en el momento que la familia decidió poner depósito a plazo y recibe tasa de interés está haciendo especie de emprendimiento financiero y la decisión es razonable frente a la coyuntura del país, porque puede complementar ingresos”.
Desde el Colegio de Economistas de Pichincha se señala que la inclusión y educación financiera aseguran el acceso a productos financieros y un mejor manejo de las finanzas. (I)