Momentos decisivos en nuestra vida
Nada más decisivo cuando ingresamos a la universidad y elegimos una carrera profesional que nos acompañará toda nuestra vida, crucial el saber elegir la pareja conyugal con la cual estaremos en las buenas, las malas o las peores.
En realidad son momentos determinantes en los cuales tomar una decisión, puede convertirnos en seres felices o infelices durante nuestra existencia; a la par, el momento que elegimos un presidente, asambleístas, alcaldes, prefectos, debemos actuar con cabeza fría pensando en el bienestar de la sociedad y en el país que dejaremos a nuestros hijos y nietos.
Algunas personas me manifestaron que están pensando salir del país, debido al auge delincuencial y alta inseguridad que rodea a nuestra patria, que tan solo están esperando para ver qué candidato irá a Carondelet y ver qué medidas toma al respecto, para alistar maletas.
Les he dicho que esperen, que no se apresuren, que el pueblo es sabio y sabrá tomar las mejores decisiones para elegir de manera salomónica a los candidatos que enrumben al país en el sendero de la paz, el trabajo y la seguridad.
Varios candidatos se han presentado y tuvimos la oportunidad de verlos la semana anterior debatiendo sobre diversos ejes que requiere nuestro país, indudablemente el tiempo fue muy corto para conversar sobre las propuestas, pero creo que con este encuentro nos bastó para medir el liderazgo, conocimiento, planes de cada uno de ellos.
Recuerdo que hace años atrás falleció un candidato a presidente del país, el Eco. Abdón Calderón, aspecto que me impacto mucho, ya que nuestra tierra de paz se nos fue de las manos por unos momentos, pero hoy al ver a candidatos, autoridades electas, directores departamentales y en general a gente común y corriente ser víctimas de mafias y del crimen organizado en varias ciudades del país, nos permite reflexionar y pensar de manera clara y contundente por el candidato que votaremos.
Escribo este editorial el domingo 20 de agosto y desconozco a los candidatos que ingresarán a la segunda vuelta, solo espero que cualquiera que gane, cumpla la promesa de conducirnos a un clima de progreso y bienestar. (O)