Medicina rural con plantas ancestrales
La medicina ancestral se mantiene vigente, sobre todo en comunidades de la provincia. La utilización de plantas que curan distintos males del cuerpo es un aporte para el restablecimiento natural de la persona.
El psicólogo clínico, Gonzalo Amaya, indicó que la medicina ancestral aún es utilizada en las zonas rurales e incluso en la zona urbana.
Las plantas medicinales: Toronjil, manzanilla, menta, llantén y otras especies se utilizan para aliviar los conocidos cólicos, dolores estomacales, dolores musculares y presión arterial.
Los pueblos indígenas, especialmente en la Amazonía poseen un laboratorio con diversas especies naturales que son fusionadas y en ocasiones cocinadas para obtener los extractos y así curar al enfermo.
La medicina ancestral está presente en la cultura. Hay plantas que son totalmente conocidas por sus poderes curativos, pero nunca está demás acudir hasta los centros de salud de la provincia para un chequeo general.
Las plantas medicinales se pueden usar en el embarazo, especialmente la linaza, ya que aumentaría los fluidos cervicales para el parto y disminuye el dolor.
De igual forma, la manzanilla es desinflamante, analgésico, antiespasmódico, sedante, tónico y alivia las nauseas.
El jengibre previene y calma las náuseas y vómito, posee un principio activo que contribuye a mejorar las digestiones. Además es antiemético, se emplea como remedio para combatir todo tipo de mareos.
La malva suaviza el estómago, rebaja la acidez, disminuye la pesadez del estómago y el vómito. (I)