El Sentido Común
Este es un tema que lo vivimos a diario, y para comprenderlo podemos decir que este concepto se compone de: ‘común’, que se lo puede atribuir a la pluralidad de los individuos que se expresan mediante un concepto, y ‘sentido’, que se refiere a la sensibilidad del sistema nervioso refiriéndonos a los sentidos: gusto, oído, vista, tacto, olfato. Entonces el Sentido Común se convierte en una capacidad natural de la comunidad para vivir desde un código simbólico compartido, que les permite percibir la realidad, o asignarle un sentido a personas, objetos o situaciones, que resulta obvio para el común de los integrantes de esa comunidad.
Evidentemente, es inevitable que los seres humanos compartamos muchos temas; de hecho, cuando la familia, el barrio, la ciudad y el país comparten o están de acuerdo sobre algo, entonces hablamos de sentido común, en tal virtud nuestras actuaciones en la sociedad y nuestra interpretación del mundo se basan en torno a lo que la mayoría piensa sobre algo en particular. Efectivamente, el comportamiento de las personas está influenciado por el pensamiento social y obedece a una lógica universal.
De la misma manera, es necesario entender que nuestro accionar debe estar encaminado en primer término a forjar nuestra personalidad e incorporarnos a la colectividad de manera creativa y no sumisa; respetando las normas y la convivencia social. Como lo decía Benjamín Franklin: “El sentido común es la cosa que todos necesitamos, que pocos la tienen y que ninguno cree que le falta”.
En todo caso el sentido común es ese algo que los seres humanos necesitamos tener y más aún aplicarlo en los diferentes órdenes de la vida. Dentro de este contexto, el Marketing como disciplina esencialmente humana no puede soslayarse de esta realidad, de hecho, el sentido común es el primer camino para posicionar a la empresa en un mercado tan competitivo como el que estamos viviendo.
Hacer lo que nos gusta que nos hagan y no hacer lo que no nos gustaría que nos hagan, parecería ser el primer principio de un Marketing con sentido común. Por otro lado, y para escudriñar un poco más es muy importante el conocimiento que usted tenga de su empresa, es decir tener claro cuales son sus debilidades y sus fortalezas, antes de establecer en forma correcta las estrategias de mercado.
En la vida y en los negocios, permítale obrar a su sentido común, quizá esto nos conduzca a ser más efectivos, más tolerantes, más humanos. A la hora de tomar decisiones, el sentido común es un tema que no se lo debe soslayar; pues éste nos permite ser menos egocéntricos, más pragmáticos, más deliberativos, y más justos. (O)