Más de un siglo de amor a su familia
En las alturas de los Andes ecuatorianos, donde la ciudad de Ambato se encuentra abrazada por montañas imponentes, hay un hombre que ha sido testigo de la evolución de esta tierra a lo largo de más de un siglo. Juan Antonio Sandoval Chango, conocido cariñosamente como Don Juan, celebra sus 107 años de risueña existencia rodeado del amor de su extensa familia: 10 hijos, 31 nietos, 48 bisnietos y 20 tataranietos.
Desde los adoquines que vieron sus primeros pasos hasta las grandes avenidas que marcan el crecimiento de Ambato, Don Juan ha dejado una huella imborrable. Su viaje en el mundo del trabajo comenzó a la temprana edad de 10 años, cuando las responsabilidades no eran solo un deber, sino una forma de contribuir al sustento de su familia.
Sus primeras incursiones en el mundo laboral lo llevaron desde pequeñas tareas de apoyo a los obreros municipales hasta desafíos más significativos, como picar piedra y convertirse en albañil. Con el tiempo, se convirtió en el respetado Jefe de Trabajadores, liderando con dedicación y habilidad.
Sin embargo, su contribución más destacada fue durante la reconstrucción de Ambato después del devastador terremoto de 1949. Don Juan emergió como una figura clave, liderando la revitalización de su amada ciudad. Su liderazgo y experiencia fueron esenciales para la reconstrucción, y su pasión por Ambato se reflejó en cada ladrillo colocado y en cada estructura restaurada.
A lo largo de sus 70 años de dedicación al Ilustre Municipio, Don Juan fue el artífice de innumerables proyectos que dan forma a la belleza tradicional de Ambato. Su jubilación en el año 2000 marcó el final de un capítulo laboral, pero su legado perdura en cada rincón de la ciudad.
La vida de Don Juan ha sido más que sus logros laborales. Ha sido testigo de eventos históricos desafiantes, enfrentando pandemias, terremotos y erupciones volcánicas. Su capacidad de adaptación y resistencia ha sido admirable, demostrando que la fortaleza de su espíritu es tan duradera como las estructuras que ayudó a construir.
Apasionado seguidor del Técnico Universitario y amante de la música tradicional nacional, Don Juan ha demostrado que las pasiones personales pueden ser tan duraderas como el concreto de las edificaciones que ayudó a erigir. Su nombramiento como Director de Obras Públicas Ad honorem por el Alcalde de Ambato Luis Amoroso en su centenario, fue un reconocimiento merecido a su trayectoria excepcional y su espíritu inquebrantable.
Nacido el 24 de febrero de 1917, Juan Antonio Sandoval Chango no solo ha sido un pilar en la construcción de la ciudad de Ambato, sino también un modelo de fortaleza y amor por su comunidad. La Familia Sandoval Chasi celebra la vida de Papá Juan, cuya existencia es un relato de persistencia, dedicación y profundo arraigo a su tierra natal. Un verdadero hijo de Ambato, su legado es un testimonio de la capacidad humana para construir un legado de amor familiar que perdurará por generaciones. (I)
