¿Negro o ciudadano?

Columnistas, Opinión

Sin duda creo que el jugador de Real Madrid Vinicius ha sido el jugador con mayor cantidad de ataques racistas en España; al tener la oportunidad de mirar algunos pasajes del partido de fútbol de este fin de semana entre el Valencia y el Real Madrid va mi comentario:

La mayoría de las personas encontramos que se usa el color de piel para diferenciar entre las gentes categorizadas como negras y blancas, aun es más notorio estas reacciones cuando un negro o afrodescendiente comete algunos errores o  delinque, como por  ejemplo: si se pasa el semáforo en rojo lo tildan de “negro irrespetuoso o negro bruto”, si robó “negro ladrón”, si asesinó “negro asesino” si erró meter el gol “negro bruto”, si no está con ropa adecuada “negro repugnante”,  en fin; sale de parte de muchas personas  esos eufemismos  en contra del ciudadano afrodescendiente. 

En estos últimos días he aprendido que el antirracismo, es un desgaste total para la salud mental y poder lograr la sana convivencia social, tampoco no estoy interesado en recoger las migajas de compasión que caen de la mesa de alguien cuando tiene este tipo de reacciones racistas, nosotros los afrodescendientes queremos el menú completo de los derechos que contempla en la Constitución y las Leyes, tampoco estamos buscando venganza con todo el pasado vivido, sino, queremos sanar nuestra alma.

Con el antirracismo no se combate devolviendo violencia con violencia o agrediendo de palabra y obra, se lo hace con educación, hay que ponderar   justicia, piedad, amor, paciencia y mansedumbre; peleemos la buena batalla de la fe y el respeto al otro. 

Lo ocurrido en estos días en el estadio de Mestalla de Valencia, me hice ciertas preguntas: ¿Por qué no los gritos racistas a Mendy, Rodrigo Rudiger, Tchouameni y a Camavinga?  ¿Por qué no a los jugadores “negros” del Valencia y de la Liga española? Me opongo rotundamente a todos los insultos racistas, para mí no denota el color de piel, sino que designa una clase de criaturas por el COLOR DE SUS ALMAS, aquellos que pisotean a hombres indefensos y los convierten en lo que llamamos «esclavos negros», esos cleptómanos de hombres, aunque su piel sea tan blanca como la nieve, SON LOS VERDADEROS NEGROS RACISTAS.

            La dominación cultural como efecto de la colonialidad, fueron aquellos con su tendencia al blanqueamiento etnico-racial, que marcaron el color negro a lo aberrante y el blanco a lo puro. Les pido no me llamen negro, llámame de mi nombre o como un ciudadano más. Debo insistir que la escuela y la educación en general, pueden idear estrategias orientados a subvertir la colonialidad cultural y del ser, el Sistema de Educación actual poco o nada han hecho para ir erradicando el racismo. (O)

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