La Semana Mayor
La Semana Mayor o Semana Santa para nosotros los católicos comienza con las primeras vísperas del domingo de Ramos, recordando la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén antes de su crucifixión, ya que Jesús ingresa a Jerusalén montado en un asno para cumplir una antigua profecía, se le llama domingo de la pasión porque en la misa se lee todo el relato de la pasión, antes de la misa en esta era moderna ya no es obligatorio usar palmas, se puede utilizar olivo, sauce, abeto entre otras hojas de árboles, “la palabra hosana “ es un grito de júbilo y una oración profética.
¿Como se calcula las fechas en que se conmemora la Semana Santa ¿Por qué cambia año tras año? La respuesta es simple la Semana Mayor no se programa en función del calendario gregoriano, se calcula sobre una combinación entre este y los ciclos lunares; así, el Domingo de Resurrección o Domingo de Gloria se establece en el primer domingo posterior al primer plenilunio (es decir ciclo de luna llena) que sucede al equinoccio de marzo; de este modo, los ciclos lunares son parte de esta determinación que condiciona las fechas de la Semana Mayor, la cuaresma y el carnaval.
Pero ¿por qué? Podría preguntarse; y la respuesta se remonta en la noche del tiempo, cuando las primeras comunidades festejaban el paso de estación, tras el equinoccio que marca el inicio de la primavera (hemisferio norte), de allí el origen de la palabra pascua que se deriva de paso y recoge el símbolo renacer de la tierra. La pascua, el renacer, la libertad, la fiesta con que la cosmovisión judeocristiana festeja; en el viejo testamento la epifanía de la libertad del pueblo hebreo, esclavizado durante cuatrocientos años en tierra egipcia; y, la memoria, enseñanza y legado de Jesús, el Cristo de la religión católica que, tras ser crucificado, muerto y sepultado en Viernes Negro, emerge de la muerte, la vence y conquista, en el Domingo de Gloria para enseñarnos el camino de la luz y la vida.
El tiempo en que camina la vida es un espiral que dibuja, desde el origen de las tradiciones, usos y costumbres, los profundos significados que dan valor a los credos y cosmovisiones; la pascua es recordar el paso hacia la vida; llega tras la cuaresma en la cual el neófito se compromete con la disciplina, el esfuerzo y la solidaridad que son inteligencia, voluntad y trabajo, hermanas de la libertad, la igualdad y la fraternidad como pilares constitutivos de la vida. Este artículo está dedicado para los chicos de colegios religiosos que a través de mi correo electrónico me solicitaron tratar este hermoso tema de la Semana Mayor. (O)