Batalla de Pichincha / Editorial

Editorial, Opinión

       La Batalla de Pichincha fue un hecho histórico que marcó la historia de nuestro país donde se dio la Independencia de la nación ecuatoriana, tras una ardua disputa por las tropas libertarias, comandadas por el Mariscal Antonio José de Sucre. 

   La libertad de un país representa el nacionalismo adquirido por temas de sentido de pertenencia, dado a que, las personas dentro de una nación, se identifican con los colores de una bandera, donde el trabajo y las oportunidades para progresar son derechos universales. 

   Tener un Estado con diferentes etnias y culturas, evocan la unidad de trabajar en conjunto, por un territorio libre, sin la necesidad de tener gobiernos estatistas, donde se crea que, mientras más impuestos se ponga a la industria privada, eso será la solución, limitando el trabajo con miedo a despidos innecesarios. 

   Esta fecha, recuerda justamente eso, de no ser oprimidos por terceros, sino tener la libertad de escoger de cómo progresar bajo un sistema de Gobierno abierto a diferentes tendencias políticas y no de “actores políticos” refugiados fuera de la nación tras haber hecho daño a un país que necesita libertad política, económica y social. (O)

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