Paralizaciones ensombrecen tranquilidad nacional
La eliminación de los subsidios a los combustibles es el denominador común de las “movilizaciones sociales”, “protestas pacíficas”, “plantones”. El Ecuador ha registrado dolor, violencia, pérdidas económicas y afectaciones en los diferentes sectores desde el mantenimiento vial hasta las actividades educativas pasando por la suspensión en la atención a los niños de los Centros de Desarrollo Infantil (CDI) con estas decisiones y acciones.
Octubre de 2019 y junio 2022 son fechas incrustadas en la historia del país. El nuevo anuncio sobre la eliminación de subsidios a combustibles es el motivo para las marchas propuestas por el Frente Popular (12 y 13 de junio 2024). A este hecho se incorpora la convocatoria de la Unión Nacional de Educadores (UNE) para la marcha nacional para el cuatro de julio.
Los ecuatorianos con las manifestaciones han experimentado violencia, terrorismo, conductas que pierden la identidad individual e incluso polarización. Y, uno de los aspectos a revisar son las pérdidas económicas. Del tres al 14 de octubre del 2019 se registró afectaciones que ascendió a 821,68 millones de dólares; mientras que, del 13 al 30 de junio del 2022, los efectos perjudiciales llegaron a los 1.115,4 millones de dólares, según el Banco Central del Ecuador. (I)
