Retorno a clases y economia familiar
A puertas del regreso a clases de la educación inicial, básica y bachillerato, en los regímenes sierra y amazonia, los padres de familia se encuentran en los ajetreos por cumplir previo al inicio de clases, con los requerimientos formales para la matriculación, lista de útiles, uniformes, transporte y otros aspectos educativos de sus hijos, todo esto causa gastos muy considerables a las finanzas familiares. Para mitigar en parte estos egresos ineludibles, el Código del Trabajo en su artículo 113, describe que todo patrono en los sectores publico o privado hasta el 15 de agosto en la sierra y el oriente, debe pagar el valor equivalente a un salario básico unificado vigente (460 USD) siempre y cuando el trabajador haya laborado desde el 01 de septiembre del año anterior, hasta el 31 de agosto del año en curso y este acumulando la entrega de decimos, caso contrario si el tiempo de trabajo fue menor a este, se deberá prorratear los meses y días y cancelar el proporcional, forme o no parte de la institución.
En necesario indicar que no siempre el pago de una matrícula o pensión escolar alta, es una garantía de mejor calidad de educación, sin embargo, el Ministerio de Educación autoriza los valores para cada establecimiento privado, aunque en muchas ocasiones los padres de familia se quejan de incumplimiento de estos valores y además que en las instituciones educativas exigen otro tipo de útiles que no necesariamente son escolares o para usos de la institución, porque se asume que estos costos constan dentro del valor de la matricula y pensión. Por otro lado, se exige la adquisición de textos escolares en sitios específicos y únicos, así como los uniformes escolares, lo que debería ser controlado rigurosamente estas exigencias, porque el usuario debe tener la libertad de seleccionar donde más le convenga y las imposiciones sancionadas drásticamente.
Así las finanzas de las familias con hijos en edad escolar se estrechan este mes e incluso unos dos o tres meses subsiguientes por los pagos diferidos con tarjetas de crédito. En honor a la verdad si bien el orden de prioridad o prelación de la atención a cada integrante de la familia es salud, alimentación, vestido, vivienda y educación, empero la mejor herencia que se puede y debe dejar a los hijos es una buena educación, porque esto les permitirá el resto de sus vidas salir adelante y prosperar, más allá de los bienes o propiedades que queramos dejarles. Una buena educación, con principios morales, éticos y académicos, serán las columnas y estructura del futuro de los hijos. Definitivamente la inversión en salud, alimentación y educación son el mejor legado que podemos dejar a nuestros hijos. (O)