Lo encuentra sin vida
La vida de un hombre se apagó, dejando un profundo vacío en el corazón de su familia y amigos. A sus 93 años de edad, este hombre falleció en paz en su casa de la avenida El Rey y Eugenio Espejo.
Su hija lo encontró sin vida en su habitación. El cáncer de colon, con el que había luchado valientemente, finalmente lo venció. La noticia de su partida sumió a la familia en una profunda tristeza.
El hombre era más que un padre, era su confidente, su guía. Su ausencia se siente en cada rincón de la casa. Aunque la muerte es inevitable, la pérdida de un ser querido siempre deja una herida difícil de sanar.
En medio del dolor, la familia recuerda con cariño los momentos compartidos, las enseñanzas recibidas y el legado que dejó. Su espíritu generoso y su fortaleza seguirán siendo una inspiración para todos los que lo conocieron. (I)