Robo, persecución y reencuentro
En Cunchibamba se tejió un relato de angustia y alivio, que nos recuerda la importancia de la solidaridad y la rápida acción policial.
Un hombre de 52 años de edad, se encontraba sumido en una profunda preocupación. Su hijo había sido víctima de un asalto. Dos camionetas doble cabina lo habían interceptado en la Panamericana Norte, a la altura de un conocido Night Club, despojándolo de su camión, un JAC blanco, cargado de material eléctrico.
La noticia se propagó rápidamente. El ECU-911 activó sus protocolos de emergencia y los agentes policiales iniciaron una intensa búsqueda. Kilómetro a kilómetro, recorrieron las oscuras carreteras del sector, con la esperanza de encontrar el vehículo robado y devolverlo a su legítimo dueño.
El destino, sin embargo, les tenía preparada una sorpresa. En las inmediaciones de Puerto Arturo, en la parroquia Unamuncho, los agentes localizaron el camión abandonado. El corazón de los afectados se aceleró al recibir la noticia. Inmediatamente se dirigieron al lugar, donde lo esperaba su fiel compañero de trabajo, intacto y listo para volver a sus manos. (I)
