El engaño bajo las ruedas
Un ciudadano se ve sacudido por una trama de engaño que envolvió a un vehículo, dos compradores y una empresa de alquiler. Un caso de estafa que expone la vulnerabilidad de las transacciones en el mercado automotriz y pone en evidencia la necesidad de extremar las precauciones al momento de adquirir un vehículo.
La historia comienza con un ciudadano ambateño que, confiando en una oferta tentadora, adquirió un vehículo Chery el pasado 23 de septiembre. La transacción, aparentemente normal, se tornó en una pesadilla cuando el supuesto vendedor, incumplió con el trámite notarial para el reconocimiento de firma. Al darse cuenta del engaño, el afectado no dudó en presentar una denuncia por estafa.
Mientras tanto, en un giro inesperado, representantes de una empresa de renta de autos de Quito llegaron al lugar. Con documentos en mano, identificaron el vehículo como propiedad de su compañía y aseguraron que había sido rentado días atrás. Gracias a un sistema de GPS, pudieron rastrear el vehículo hasta este punto de la ciudad.
La sorpresa fue mayúscula al descubrir que la matrícula del vehículo coincidía con la del supuesto vendedor, Calderón Ramos. Sin embargo, una inspección más detallada reveló que los documentos habían sido alterados. Ante la evidencia de un posible delito, se solicitó la intervención de la Policía Judicial, quienes se encargaron de realizar el levantamiento de indicios y el traslado del vehículo a los patios de retención. (I)