Ay de mi si no evangelizo

En un día como hoy, hace diez años, recibimos al pastor que el Espíritu Santo había desposado con esta pequeña porción del Pueblo de Dios. Monseñor Jorge Giovanny Pazmiño Abril fue consagrado en nuestra Catedral y nombrado cuarto Obispo de Ambato. Desde aquel momento su presencia es un constante don divino, una guía precisa y una voz coherente.
A lo largo de estos años, los ambateños experimentamos su presencia en su papel de padre y pastor y nos contagiamos por la ilusión evangelizadora que emana y que, como sabemos, no proviene de otra fuente, sino del mismo Cristo y de la frase que acompaña su escudo episcopal: Ay de mi si no evangelizo.
El Sermón 340,1 de San Agustín incluye una expresión muy conocida entre los creyentes: “Para ustedes soy obispo, con ustedes soy cristiano”. Usted ha encarnado de manera clara esta exigencia de ser modelo de pastor que se entrega en el ejercicio de su ministerio con sacrificio y sin olvidar la caridad de Cristo, que se hace servidor de todos, compañía cercana, camino seguro y aliento para sus fieles.
Si bien, la misión del que pastorea el rebaño representa un desafío, en parte porque la Iglesia tiene la obligación de considerar todos los elementos de la vida, sin importar su naturaleza y porque el motor que impulsa el progreso histórico-social frecuentemente contradice los valores proclamados por los cristianos, el Obispo mantiene la fe en la acción del Espíritu Santo y actúa con empeño, confiando en la asistencia divina, a la hora de abordar temas variados: sacramentales y litúrgicos; teológicos y pastorales; legales y económicos; sociales y culturales; políticos y religiosos.
Damos gracias a Dios por su ministerio fecundo al servicio de tantas comunidades de la diócesis que lo tiene como padre y pastor. Pedimos al Señor que lo fortalezca y bendiga y a María, Nuestra Señora de la Elevación, que lo cubra con su manto y amor maternal. Como miembros de la comunidad que dirige, frente al Señor sacramentado, cuente con la oración de todo el pueblo por su persona, obras e intenciones. Este es el regalo, hecho oración, que queremos ofrecerle este día. (O)