Guerra comercial / Editorial
La lucha para no torcer el brazo por parte del presidente de EE.UU, Donald Trump, sobre todo con China sigue complicando al mundo comercial por el impacto en los precios por el incremento de aranceles.
China es una potencia y ha ido ganando terreno en el mundo, con sus productos baratos, al punto de llegar a amenazar a los países que pacten con EE.UU. La posición de China de medir fuerzas con EE.UU y también subir aranceles a los productos estadounidenses está escalando y podría poner en jaque a la economía mundial.
China posee las tierras raras con la que producen tecnologías que se utilizan actualmente en un sinnúmero de productos como automóviles, aviones, computadoras, armamento y otros. Esto sería usado por los chinos como una herramienta estratégica comercial para presionar una rebaja de aranceles y, de no hacerlo, se podrían aumentar los precios de los productos.
Por otro lado, los grandes almacenes de EE.UU como Target, Walmart ya están sintiendo escasez de productos que podrían hacer colapsar estos grandes negocios. La guerra comercial podría afectar a Canadá, América Latina y México. (O)