Angustia por represamiento
Angustia y desesperación viven desde hace dos meses los moradores de la calle La Plata que colinda con la Quebrada Pisocucho, por el represamiento del agua lluvia, servidas y de riego, formando dos ‘lagunas’.
Oswaldo Espín, ex dirigente del Barrio La Victoria perteneciente a La Península dijo que radican 1.500 familias, en la calle La Plata son 15 familias conformadas entre 80 y 100 personas.
Laura Padilla vive 10 años en el sector y parte de su vivienda se encuentra inundada, no pudo rescatar sus enseres como una cocina industrial, paila, camas, herramientas de trabajo y otros objetos.
Clamó ayuda de las autoridades ante el peligro inminente a lo cual se suma la insalubridad por los malos olores de las aguas servidas y debido al calor intenso la proliferación de mosquitos y zancudos. (I)