¿Un año más o un año menos? / Dr. Guillermo Bastidas Tello
Santa coincidencia, anoche durante mi habitual insomnio añoso me encontré con mi mejor amigo, mi amigo de la infancia, de la adolescencia, de la juventud, de la joven adultez y de la añeja adultez. El negro lo apodaban, por su descendencia y por su carácter indomable. Mestizo, más indígena que blanco; el negro perseverante, necio, obstinado, apasionado con la vida, enemigo de la injusticia y la ingratitud. Este negro me despertó del sueño patológico de mi vida domésticamente científica.
Me recordó con una llamada telefónica casi telepática para preguntarme algo que le había preocupado y hasta le causaba mucha angustia desde las 12 de la noche. Su inquietud radicaba en la duda de que, cuando se cumple años se los deben celebrar o despedir; es un año más de vida o es un año menos de existencia decía el negrito.
Cumplir muchos años negrito, no solo es cuestión de una cifra. No solamente cumples un año más. De alguna manera cumplir años nos obliga a reflexionar y recapacitar sobre nuestra vida. Sobre todo, tirando la vista atrás y remontándonos a nuestro cumpleaños quince o veinte. Una vida, una década o una centuria. Esto nos debe hacer pensar metódicamente sobre las cosas que nos ha pasado y lo que hemos vivido. Lo que sufrimos y lo que gozamos; lo que ganamos y lo que perdimos; por lo que lloramos y por lo que reímos; lo que quisimos y lo que odiamos.
Y recuerdas negrito, tu cumpleaños dieciocho, en aquellos días nuestras aspiraciones fueron más sencillas. Simplemente buscábamos como colarnos en una fiesta Jet set, encontrar una enamorada, pasar el año lectivo, ser un joven popular y excelente deportista.
Al diablo con el FMI, la OMS, el Derecho Penal, la filosofía de Nietzsche, el poema de Neruda, la guerra del Golfo, ser diputado nacional o alcalde. En el cumpleaños diecinueve, la aspiración más reivindicatoria fue el carro deportivo color rojo y la casa con piscina.
Hoy estas de cumpleaños negrito. Deberías estar feliz, ya sea un año más o un año menos de vida; al fin y al cabo, es un año de existencia planetaria. Un año más o menos de lucha, un año más o un año menos de amor; un año más o un año menos de explotación; un año más o un año menos de tiranía; un año más o un año menos de populismo; un año más o un año menos de ingratitud.
Cumplir años negrito siempre es una opción mucho mejor que no hacerlo o no existir. Y aunque cambia la cantidad de años, y simbólicamente vas más cerca de los 60 que, de los 50 años, tu vida siempre fue y ha sido un punto de inflexión filosófica. Negro cuchufleto, negro garufa, negro renegrido, negrito del alma. Tu vida es vida, tu muerte seguro que será también el impulso de una nueva vida.
Que, si es un año más o menos de vida, tú lo sabes, la realidad es que lo has vivido negrito con un optimismo contagioso, con una terquedad obsesiva, con una pasión desenfrenada, con una entrega bondadosa y con una fidelidad social socialista.
Son tantos años de lucha, sin evitar ninguna crisis en el horizonte, poniéndole el pecho a las balas, las manos al fuego y con ánimo de continuar echándole guerra a tus largas horas de vuelo, que parece ya piden pista de aterrizaje.
Recuerda negrito que:
Que el mejor momento del día puede estar por llegar mañana; que el odio es una gran pérdida de tiempo; que la humildad es una actitud obligatoria de las grandes personas; que no hay cosa más deliciosa que aprender y estudiar continuamente; que debes siempre divertirte, Como decía Confucio “encuentra un trabajo que te guste y no volverás a trabajar en tu vida”; que siempre habrá un mediocre presumido troglodita por encima tuyo y algún genio escondido por debajo; que cuando no hay un amor verdadero hay muchos es que, es que , es que; que si llegas a encontrar el amor de tu vida nunca se te ocurra dejarlo ir y mi querido negrito nunca te olvides que hay que dar gracias a Dios y a la vida por lo que tienes, nunca de reniegues por lo que te falta y sobre todo negrito, hasta el amor se puede acabar, pero jamás la gratitud.
Feliz cumple años te desea negrito: Tu amigo, tu sombra, tu enemigo, tu verdugo, tu jefe, tu pesadilla, quien te acompañará hasta el final y un poco más.
No me vuelvas a preguntar negrito ¿UN AÑO MÁS O UN AÑO MENOS? (O)