El ‘Buen Vivir’ desde el contexto intercultural
El Sumak Kawsay se logra mediante la interculturalidad tomando en cuenta que el Ecuador es diverso. (Foto El Heraldo)
Sumak Kawsay, traducido al español, significa el Buen Vivir, esta palabra consta en la Constitución del Ecuador del 2008 y es puesta en práctica con varios rituales dentro de la cosmovisión andina.
El Ministerio de Salud realizó la ceremonia en honor a nuevas autoridades zonales de la provincia. Estuvo presente el Coordinador Zonal, César Molina. La finalidad fue que el personal y líderes construyan el Sumak Kawsay.
“Nuestros antepasados se reunían de esta manera para todo programa, presidido por las princesas y líderes de la comunidad”, indicó Rufino Masaquiza, quien fue el encargado de liderar esta celebración.
Marcia Masaquiza, promotora distrital de Salud Intercultural 18D01, indicó que este centro ceremonial fue construido por las manos de las nuevas autoridades zonales. “Así debe ser la interculturalidad, construida desde nuestros corazones y manos”, afirmó.
La actividad se cumplió en celebración del Día de la Tierra (pacha mama en quichwa). La promotora auguró éxitos y puso en manos de las autoridades la institución.
“Estas similitudes, así como lo riqueza de ambas nociones, no son fácilmente apreciables mediante su extrapolación nomotética directa a categorías occidentales pero un esfuerzo hermenéutico ideográfico puede brindarnos una buena aproximación”, explica Carlos Gómez, autor del libro ‘La religión en la sociedad postsecular’ (2014), en relación a lo que se refiere al Sumak Kawsay.
En cada eje se colocó un funcionario representando los cuatro elementos de la naturaleza. El coordinador fue el fuego, Joel Díaz como viento y Rosa Masabalín fue la madre tierra y para la representación del agua estuvo María de Lourdes Freire.
Los presentes saludaron a los cuatro suyos: Norte, Sur, Este y Oeste para que les den sabiduría, fuerza y que el espíritu se llene de positivismo. Luego cada elemento de la naturaleza recorrió el círculo formado por los presentes entregando una parte de estos elementos, luego el yacha o sabio, limpió la energía de cada persona para finalmente compartir alimentos entre todos. (I)
