Caballos se robaron el Show
Piruetas y pasos elegantes fueron el atractivo del Desfile Chacarero que recorrió las principales calles de la zona alta de Ambato, ayer. A este desfile, las delegaciones de jinetes estuvieron acompañadas de grupos de danza folklórica quienes al ritmo musical y con el ¡Viva Ambato! Marcaban el preámbulo de la Fiesta de la Fruta y de las Flores.
Carros tradicionales utilizados para la agricultura y ganadería también hicieron su paso con vistosos adornos y lleno de niños vestidos como chagras.
Además, en cada delegación de haciendas ganaderas, veterinarias y demás, resaltaban las Chagras Bonitas, o reinas de clubes.
Una de las delegaciones invitadas fue Salcedo, con sus reinas y la prefecta de Cotopaxi, Lourdes Tibán, quien resaltó: “Estamos aquí para saludar a Ambato junto a nuestra rienda brava del cantón, que son el ícono de los chagras de la provincia. Saludamos a los campesinos que con lluvia o sol labran la tierra”.
Eladio Rivadeneira, coordinador del evento, señaló que el Desfile Chacarero y el Rodeo Criollo son parte fundamental de la identidad rural ecuatoriana. «El caballo es más que un medio de transporte, es nuestro compañero de vida», afirmó.
Tras el recorrido por las calles de la ciudad, los jinetes se congregaron en el Centro de Mercadeo Agropecuario Ambato (Cemeag), donde se llevó a cabo la exhibición de habilidades hípicas. En el Rodeo Criollo participaron 124 chagras provenientes de diversas regiones del país, quienes demostraron destrezas en monta y manejo del ganado.
El Rodeo Criollo y el concurso del Rescate a la Princesa fueron el broche de oro del Desfile Chacarero, que celebró su edición número 26 con un despliegue de tradición y cultura ecuestre en Ambato.
Uno de los momentos más esperados fue el concurso del Rescate a la Princesa, una competencia que pone a prueba la habilidad y rapidez de los jinetes en el campo. La tradición, que se ha mantenido a lo largo de los años, busca resaltar la valentía y destreza de los participantes.
El evento no solo resaltó la tradición del chagra, sino que también dinamizó la economía local, atrayendo a turistas y comerciantes que aprovecharon la afluencia de visitantes para ofrecer productos típicos y artesanías. (I)