Campamentos Vacacionales / Editorial
Ha llegado la temporada vacacional en la sierra y en el oriente, luego de cumplido el periodo de estudios correspondiente al semestre último, para que los estudiantes de todas las etapas académicas tomen un descanso merecido y retomen fuerzas para continuar con los siguientes ciclos.
Aparecen numerosas opciones de cursos vacacionales, tanto de parte de instituciones públicas como de privadas, entre las cuales los padres de familia deben escoger las que consideran mejores para ofrecer a sus hijos, analizadas desde varias perspectivas de localización, de calidad y de costos.
También existen casos en que las propias familias organizan las vacaciones de sus vástagos con paseos al campo, a los balnearios, a las playas y al exterior, según las disponibilidades de tiempo y de dinero.
Lo importante es encontrar los ambientes de total seguridad para los niños y los jóvenes que participan en los campamentos; que sus organizadores sean personas totalmente honestas, que todo el personal que colabora sea, asimismo, plenamente confiable, con principios morales, respetuosos de los valores éticos y espirituales, con antecedentes indiscutibles, no improvisados ni con taras de ninguna clase.
Los padres de familia deben ser vigilantes permanentes en los campamentos para que exista irrestricto respeto a sus hijos en todos los aspectos. Se conoce tantos casos de abusos y de maltratos en la vida grupal. Por ello, la exigencia previa a la concesión de permisos por parte de las autoridades. Los tiempos actuales exigen toda clase de controles legales y prácticos. (O)