China, continúa su afán de demostrar su “fuerza” en todo el mundo

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Hace un poco más de 20 años, China, era considerada como una “potencia emergente”, debido a su fuerza de trabajo, alto número de población y exportaciones permanentes de todo tipo de coadyuvan con la globalización, pero también incrementan significativamente el Producto Nacional Bruto de los países exportadores, China, en este caso, se lleva la corona.

Ahora China, está involucrado en la mayoría de espacios de poder, es decir, además de formar parte del Grupo de los 5 “G5”, países con economías fuertes emergentes del mundo, entre ellos constan: India, Brasil, México, Sudáfrica y China; genera a través de su política tanto interna como externa, las alternativas de “involucrarse” en negociaciones internacionales con otros países, que tienen productos naturales o procesos de posible industria que a China le puede interesar.

Es así que, nuestro hermano país, Perú, permitió a China que construya el nuevo “megapuerto Chancay”, una demostración de la “fuerza” de Beijing. 

Este megapuerto en América del Sur, permitirá, según información oficial de China, que el tiempo de viaje de enormes contenedores de exportación de distintos países sea menor, y por tanto, que se pueda generar una mayor producción de diferentes materias primas codiciadas a nivel mundial y a incrementar el comercio, vinculado con la globalización.

Pero, ¿qué sucede con la independencia política de Perú en este caso?; el megapuerto de Chancay es una propuesta astuta de la iniciativa de la Franja y la Ruta de China para acceder a varios países, especialmente de América del Sur. 

Este megapuerto, obviamente trae consigo su propia tecnología, sus operadores chinos, sus “estrategias” de “desarrollo” y es operado por la empresa china Cosco Shipping Ports; hemos visto como la Presidenta de Perú, Dina Boluarte y el Jefe de Estado de China,  Xi Jinping, van a dar la “buena noticia” de este importante proyecto implementado en Perú.

Ahora hablemos de las consecuencias ambientales que la construcción de este “megapuerto” en Perú representa para todas las poblaciones de este hermano país, y empezaré contándoles que Chancay es un pequeño pueblo de pescadores, ubicado entre el desierto y el mar, a 75 kilómetros de Lima, donde aproximadamente 35.000 habitantes de éste, (seguramente hermoso pueblo), se ganaban la vida pescando y organizados con un lindo parque de diversiones.

Usualmente, comprendemos que los “procesos de cooperación internacional para el Desarrollo” remitidos por organismos como el Banco Mundial, o el Fondo Monetario Internacional y sus aliados, generan procesos dónde exprimen a los países que reciben su “cooperación” entregándoles altas cantidades de dinero a altos intereses, a cambio de la aplicación de “estrategias” como eliminar los subsidios al pueblo, o explotar los recursos naturales disponibles en dichos países, a cambio de obtener “ un grado más de desarrollo”, según éstos organismos.

China, es una potencia emergente, si, ha creado el famoso Tik Tok, con el objetivo de generar poblaciones distraídas bailando, obedientes, inmediatistas y siempre a la moda; personalmente, no tengo nada en contra de esta red social, pero es importante conocer más a fondo que hay detrás de estas intenciones del gigante asiático.

En Perú, en Chancay, la ciudadanía venía en busca de aventuras, de mar, de alegrías, de paz. Ahora se encontrarán con cemento, con una gigante construcción de un megapuerto, que une a Perú con Asia y que trae consigo enormes grúas que se elevan sobre una superficie del tamaño de “100 campos de fútbol”, operando permanentemente de forma casi “automática” es decir “tecnológica”, sin pensar ni un segundo en los daños que esto le puede generar al Planeta Tierra, pero si pensando en que China puede continuar incrementando sus altisimos ingresos económicos. ¿Y, Peru?, Perú, este megapuerto está en su “totalidad” en manos “privadas”, si en manos privadas, nisiquiera es una propuesta colectiva, es decir del Gobierno Peruano, porque las regalías sí apoyan al incremento de un sector pequeño de Perú, pero en su mayoría está en manos de China.  

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