Como identificar a un adicto / Dr. Guillermo Bastidas Tello
Lastimosamente, el adicto niega que esté en dificultades con las drogas ilícitas o el alcohol. Las frases típicas son: «Yo solo puedo salir de esto; el Luis sí es un drogadicto, pero yo no, yo sé controlarme»; «yo sólo lo hago los fines de semana o cuando voy a un paseo o fiesta».
Esta primera fase normalmente la vive también la familia, que trata de esconder la problemática, de negarla, de hacerse ilusiones de que su familiar no es adicto.
La persona se dice mentiras a sí misma. Se promete una y mil veces que será la última vez que se droga o se emborracha; que tiene una gran fuerza de voluntad para dejar el trago o la droga.
Acepta en algo sus dificultades frente a la droga, pero comienza a responsabilizar a los demás de ser los culpables de su problema.
El adicto sabe muy bien cuáles son los puntos débiles y fuertes de cada uno de sus familiares: papá, mamá, hermanos y esposa. Al conocer estos puntos los manipula o «chantajea» para conseguir lo que quiere: consumir droga. El familiar del adicto siempre debe estar atento y preguntarse: ¿Qué está buscando con la pro-puesta o acción que plantea en este momento?
El adicto sólo tiene una idea en la cabeza y es: ¿Cómo y cuándo consumiré de nuevo? A esto se llama «compulsión» o deseo irresistible.
El adicto es un mentiroso compulsivo, mentir es algo completamente normal para el adicto. Hace parte de su mundo; tiene relación con lo que decíamos anteriormente sobre el «autoengaño»: llega al punto de decirse mentiras a sí mismo.
Estimado lector si hay alguien que exhibe estas características consulte a un profesional de Salud Mental. (O)