Con tanta ideas creativas patentemos / John Tello Jara
Contraté a un vendedor para que oferte mi calzado a la zona austral me dijo don Alejandro, el zapato era de buena calidad, a un precio cómodo y los pedidos me llegaba con mucha frecuencia a mi fabrica en Ambato. ¡Un día, ya no supe del vendedor, algo preocupado por su salud o talvez por alguna enfermedad, empecé a buscarlo, hasta que llegué a las empresas que vendía mi producto y, oh sorpresa! este joven no estaba desaparecido, más bien se encontraba fabricando con mi marca, el calzado y lo vendía, como si nada pasara (historia real).
Usualmente al crear un producto, elegimos una marca para posicionarla en el mercado sin darnos cuenta que invertimos tiempo, dinero, creatividad para cumplir dicho cometido, pero si no lo patentamos es decir si no “decimos” que ese invento es nuestro con papeles en mano, es como si no existiera.
Un caso muy sonado fue el de una empresaria que viajó a EEUU y vio un producto que allí tenía mucha acogida (hamburguesas), llegó al país y ubicó ese negocio en Quito; los ecuatorianos fuimos testigos de la presión internacional (país-país) y de igual manera los puntos de vista de entidades ecuatorianas y el mismo tribunal contencioso para dirimir ese caso.
Otras empresas operan con marcas que tienen gran acogida y la insertan en sus productos, con tal de realizar la venta, sin que esto garantice las características técnicas del bien que fue creado legalmente, por este motivo realizan en varios sectores determinados barridos para ver productos “falsificados” y algunos que siendo originales ingresan al país sin el pago de impuestos.
Hoy veo tantas ideas creativas de tanto joven que ingresa al mercado con el ánimo de formar empresa, hacer negocio, pero me doy cuenta que deben revisar las leyes de patentes para crear una marca del producto; entiendo que el producto es de su misma clase o ramo, pero ese algo que distingue a su producto debe venir con una palabra, un símbolo, un número, logotipo, diseño, sonido, olor, textura o una combinación diferente que los posesione como tal. (O)