Conexión clandestina del poliducto
Un quinto “pinchazo” fue detectado por las unidades militares y policiales, en el poliducto situado en el sector de Pinguilí del cantón Mocha. Este es el segundo robo en el mismo espacio.
En el lugar se identificó a un tanquero que estaba conectado con una manguera al poliducto del lugar.
Personal de la Policía Judicial, Cuerpo de Ingenieros del Ejército y Fiscalía llegaron una vez más a este sitio para detectar lo dicho.
Recordemos que este sería el quinto robo de combustible detectado de dicha forma, en lo que va del año.
El cuarto robo fue registrado en la calle Antepara y Carlos Montufar, zona Sur de la ciudad, donde hubo una filtración o “pinchazo” de la tubería del poliducto que cruza por la zona.
Los uniformados realizaron el allanamiento de una vivienda que estaba junto al paso de la tubería y encontraron las perforaciones clandestinas con conexiones desde donde se sustraían diesel.
El combustible robado sería enviado a camaroneras y países aledaños para su venta ilegal.
El primer caso de fuga o filtración clandestina del combustible se registró en Huachi Grande, luego fue en el sector denominado ‘Bosque Acapulco’ del cantón Mocha, posteriormente en Cunchibamba sector de Pucarumí.
Con los hechos generados, las intervenciones militares son permanentes para evitar el robo o perforaciones clandestinas del poliducto.
El artículo 266 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) se refiere a la sustracción de hidrocarburos, aduciendo que “La persona que por medios fraudulentos o clandestinos se apodere de hidrocarburos, sus derivados, incluido el gas licuado de petróleo y biocombustibles, cuando sean transportados a través de un oleoducto, gasoducto, poliducto o a través de cualquier otro medio o cuando estos se encuentren almacenados en fuentes inmediatas de abastecimiento o plantas de bombeo, será sancionada con pena privativa de libertad de cinco a siete años”. (I)