CPCCS debe desaparecer / Editorial
Existen entidades públicas creadas con fines protervos que solamente han servido para satisfacer ambiciones desmedidas de gobernantes inescrupulosos, que han buscado perpetuarse en el poder con atropello a la Constitución y a los principios que norman la institucionalidad del sistema democrático.
La Asamblea Constituyente del año 2.008 reunida en Montecristi, controlada por el Presidente de la revolución ciudadana, creó el tristemente célebre Consejo de Participación Ciudadana y Control Social que es el ejemplo más contundente y claro, del daño que ocasionó en el país con las actuaciones nefastas ordenadas por el entonces gobernante.
Este mamotreto debió desaparecer en la consulta del año anterior como era la aspiración de la mayoría ciudadana; mas, consideramos que fue un error del Presidente convocante que prefirió que sus miembros fueran elegidos en las urnas; qué pretendía el Presidente Moreno con esta sui géneris actitud, acaso no intuyó lo que podría suceder en el futuro?
Las consecuencias están a la vista. Sus miembros han demostrado sus crasos errores para retornar al abuso y al atropello. Esta actitud ha merecido el rechazo popular y los enjuiciamientos por parte de la Asamblea Nacional, la Fiscalía y la Contraloría.
Según la encuesta de Cedatos, 65% de la población ecuatoriana está por la eliminación del CPCCS. Es hora de que se encuentre el mecanismo más idóneo, legal y constitucional para alcanzar este objetivo. Que la Asamblea Nacional unifique criterios y esfuerzos para encausar esta legítima aspiración de los ecuatorianos. (O)