Creación de la Villa de Ambato / Dr. Fausto Palacios Gavilanes
San Juan Bautista de Ambato fue asiento. Y corregimiento.
En 1756 fue erigido en Villa, y el “Once de Octubre de mil setecientos cincuenta y nueve”, se reafirma dicha creación…
Para que nuestra amada ciudadcita adquiriese tal título , se presentaron justificativos ante la Reina, como la existencia de más de ciento cincuenta familias españolas establecidas en su territorio , cuatro mil mestizos con casa poblada en la jurisdicción de su distrito , seis indios avecindados; con Iglesia Parroquial en su Asiento, Convento de religiosos de San Francisco. Otros pueblos tenían cinco Curatos con ocho anexos.
En fin, se presentaron otros argumentos, como la imposibilidad de administrar justicia por las Autoridades de Riobamba.
Y otros más, recurriéndose a la Audiencia de Quito, para que se erigiese en Villa el asiento de Ambato, y que se creasen los oficios de Ayuntamiento que se requieran para formar el Cabildo, debiéndose designar a los Alcaldes Ordinarios.
Por cumplidos con todos los requisitos , el Once de Octubre de mil setecientos cincuenta y nueve, la Reina expresaba : “Por tanto doy, y concedo mi real licencia para que el citado asiento de Ambato, se llame desde ahora en adelante Villa”, quiero, y es mi voluntad que use de la jurisdicción que se corresponde en su término , y territorio, y que goce de todas las honras , privilegios y prerrogativas. Ambato fue Asiento, Corregimiento, y, ¡por fin: Villa!
En la obra Hambato; de José Lorenzo Saá Bernsteín, leemos:
“Abandonamos el lugar del asiento de San Juan (de Hambato), de la Mocha, nos re – asentamos arbitrariamente de “su autoridad”, en el lugar junto al Socavón del Río Grande y vera del Chasqui – Nan (…Y alrededores… De ahí, pues, los nombres; San Juan de Ambato, y San Juan de Mocha.
En la misma obra, se refiere al Asiento del segundo Ambato, con las siguientes palabras: “ Por alguna razón estos deciden no permanecer asentados en el lugar señalado para tal, desplazándose poco después cuando : “Arbitrariamente se vienen y asientan “ en un sitio que no constaba entonces, ni tuvo nunca en los futuros días : una Licencia Real, es decir, la de Asiento…. ; esto es: para establecerse en el entonces”… ya conocido lugar junto al Socavón, denominado Hambato”.
En la obra El Prócer Tomás Sevilla. El Ambato de antaño, de Horacio Sevilla Carrasco, se manifiesta que, cuando pasaron Benalcázar y Alvarado, por las orillas del río Ambato, ya existían algunas chozas y un tambo.
Antonio Clavijo llegó “al pequeño agrupamiento de chozas, habitadas por los indios Hambatu, en la parte de una loma llamada Ingaurco ( Loma de Espinos), que tenían sus sembríos en la parte baja de la loma, conocida con el nombre de Cashapamba ( Playa Fértil )”. (O)