Dinero fácil / Editorial

Editorial, Opinión


   La crisis económica que agobia a los ecuatorianos pasa factura a los propietarios de negocios pequeños que recurren a créditos informales para tratar de sobrevivir. Otros emprendedores buscan estos créditos para empezar los negocios.

Lamentablemente, quien entra y accede a estos créditos, está sujeto a pagar intereses sumamente altos diariamente. Por lo general, las personas que acceden, en mucho de los casos, ya no son sujetos de créditos formales en el sistema financiero nacional y, por ende, su riesgo de no pago es mayor. Esto es aprovechado por presuntos prestamistas que ahogan con intereses altos a las personas.

Actualmente, algunos negocios están cerrados, otros, a duras penas, funcionan y el común denominador por el que llegaron a esta situación es el de haber accedido a créditos que se volvieron impagables. Los supuestos prestamistas recurren a la intimidación y amenaza para poder cobrar el dinero prestado.

En Ambato se observa la proliferación de personas que visitan negocios y ofrecen dinero para enganchar a los incautos y así obtener réditos económicos altos. (O)

Deja una respuesta