Diócesis entrega kits estudiantiles

Ciudad
Los kits estudiantiles son de ayuda en época de pandemia para que continúen su formación los niños de familias necesitadas. (Foto El Heraldo)


La entrega progresiva de  600 kits estudiantiles efectúa la Diócesis de Ambato para la niñez más necesitada de las parroquias eclesiásticas de la provincia. Al momento se despachó el 70%.

Este fue el esfuerzo conjunto entre la Diócesis de Ambato a través de la Pastoral Social Cáritas que sumó el apoyo de Cooperación Fraterna de la Arquidiócesis de Munich.

Los kits incluyeron  vitaminas, productos de limpieza y útiles escolares, considerando la emergencia sanitaria y los estudios desde casa.

Jorge Grijalva Salazar, subdirector de la Pastoral Social, manifestó que en el presente ‘año pastoral’ se facilita una mayor cantidad de Kits escolares  los mismos que son direccionados para las siete zonas pastorales conocidas como  ‘San Juan Bautista’, ‘La Dolorosa’,  ‘Nuestra Señora de la Elevación’, ‘Virgen del Monte’, ‘Señor del Terremoto’, ‘Niña María’ y ‘San Jacinto’.

El Padre Medardo Silva, párroco de San José de Atocha, hizo extensivo si reconocimiento a la Diócesis de Ambato por la ayuda en favor de las personas más necesitadas.

De igual manera, el Padre Oscar Santiana, párroco del Rosario en Salasaca, reconoció a la Diócesis por el respado a los más pobres.

“Agradezco de todo corazón por la donación del Kit estudiantil por ser  de gran ayuda en esta época que no tenemos dinero. Dios les page a la Diócesis”, señaló la beneficiaria Mayra Santillán.

Estos esfuerzos son parte de “anunciar la alegría del Evangelio desde el procesos de la conversión pastoral, promoviendo la Iglesia diocesana en salida, para consolidar la comunidad de discípulos de Jesucristo, Maestro y Buen Pastor”, sostuvo el director de la Pastoral Social Cáritas de la Diócesis de Ambato, Mauro Cuevas.

Monseñor Giovanny Pazmiño, obispo de la Diócesis de Ambato, delegó a  la Pastoral Social Cáritas por tres años consecutivos  operativizar este programa de ayuda a los niños de familias pobres que cursan sus estudios, en coordinación con todos los párrocos, quienes oportunamente han remitido la lista de los niños y representantes legales. (I)

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