Disturbios en USA / Esteban Torres Cobo
Los levantamientos desatados en los Estados Unidos responden a varias causas motivadas, en parte, por la crisis económica desatada por el confinamiento prolongado. Disturbios que aparecieron luego del vil asesinato policial contra George Floyd pero que se cocinaban desde hace algún tiempo. La izquierda más violenta esperaba además desestabilizar al presidente Trump, pero ha logrado el efecto contrario.
Con los demócratas entregados al radicalismo del ala socialista del partido y en franca guerra con los republicanos por las elecciones de noviembre, el ambiente es más tenso que nunca. Sin embargo, lejos de afectar a Trump con las protestas, le han permitido incorporar a su discurso de bonanza económica el de la ley y el orden.
Algo similar sucedió en 1968 y la elección fue pan comido para Richard Nixon. Trump, si supera sus constantes exabruptos, podría repetir esa historia. Lo cierto es que los disturbios agrandan aún más la brecha racial que pulula en ese país desde hace años. No contribuye a una unificación y a la superación de los problemas internos. La política de la división, de lado y lado, se cuece potente en el país del norte. (O)