Cementerios a buen recaudo / Editorial

    Los ecuatorianos vivimos ayer una fecha importante donde se recuerda con cariño y respeto a nuestros queridos difuntos que descansan en paz, tras haber tenido un gran paso en la vida terrenal, donde claudicaron valores en los hogares, dejando un gran legado, en su momento, algo digno de admirar y replicar aquellas enseñanzas en la medida de nuestro transitar.

    Familias durante todos los años, aprovechan estas fechas para llegar a los diversos cementerios, con el fin de dar a la tumba del ser querido la respectiva limpieza. Con adornos florales, entre otras cosas que se suele dejar en el nicho del fallecido, se busca agradecer y recordar a esa persona con todas las pleitesías del caso.

   La limpieza de los camposantos por parte de las familias debe ser realizada durante todo el año y acudir constantemente a visitar al familiar que se encuentra ahí y no esperar hasta esta fecha propicia para acudir a la cripta de la persona.

  Además, es importante que los encargados de la seguridad de los distintos cementerios, si hablamos dentro de la urbe ambateña, estén pendientes ante cualquier anomalía, ya que, lastimosamente, existen saqueadores de tumbas que sin escrúpulos y malintencionados llegan para robar accesorios con lo que se les suele enterrar a los fallecidos, siendo una acción negativa y deben ser castigados severamente. (O)